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23 abril 2015

Así rezan los cristianos ortodoxos.

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El texto del canto dice:

En catalán:

No deixeu de pregar al Senyor, lloeu-lo amb la vostra cançó. 
Crideu tots els herois, els seus herois perquè porten la creu davant de vosaltres. 
Digueu que va ressuscitar i que la mort no té autoritat. 
Digueu que no hi ha perdó sense la seua sang i que la llum de la Bíblia cada vegada és més forta.  
No deixeu de pregar al Senyor, lloeu-lo amb la vostra cançó. 
Crideu tots els herois, els seus herois perquè porten la creu davant de vosaltres. 
Ha vençut la foscor i, amb la seua força, ens ha il•luminat els nostres dies i ens ha portat la joia.
I la llum del dia cada vegada brilla més. 
No deixeu de pregar al Senyor, lloeu-lo amb la vostra cançó. 
Crideu tots els herois, els seus herois perquè porten la creu davant de vosaltres. 
Ha vençut els seus enemics, nosaltres hem vençut gràcies a la seua presència i a la seua sang. 
I el matrimoni que ha deixat en nosaltres cada vegada és més important. 
No deixeu de pregar al Senyor, lloeu-lo amb la vostra cançó. 
Crideu tots els herois, els seus herois perquè porten la creu davant de vosaltres. 
Viviu la joia del cel i això farà morir el dimoni.
I la nostra crida cada vegada és més forta.

En castellano:

No dejéis de orar al Señor, alabadlo con vuestro canto. 
Llamad a todos los mártires, sus mártires porque llevan la cruz delante de vosotros. 
Decid que resucitó y que la muerte no tiene autoridad. 
Decid que no hay perdón sin su sangre y que la luz de la Biblia cada vez es más fuerte.
No dejéis de orar al Señor, alabadlo con vuestro canto. 
Llamad a todos los mártires, sus mártires porque llevan la cruz delante de vosotros. 
Ha vencido la oscuridad y, con su fuerza, nos ha iluminado nuestros días y nos ha traído la joya. 
Y la luz del día cada vez brilla más.
No dejéis de orar al Señor, alabadlo con vuestro canto. 
Llamad a todos los mártires, sus mártires porque llevan la cruz delante de vosotros. 
Ha vencido a sus enemigos, nosotros hemos vencido gracias a su presencia y a su sangre. 
Y el matrimonio que ha dejado en nosotros cada vez es más importante.
No dejéis de orar al Señor, alabadlo con vuestro canto. 
Llamad a todos los mártires, sus mártires porque llevan la cruz delante de vosotros. 
Vivid la joya del cielo y eso hará morir al demonio. 
Y nuestra llamada cada vez es más fuerte.

22 abril 2015

Cañizares critica duramente al Gobierno: «Olvidan sus principios y consagran el derecho al aborto»

Álex Rosal / ReL

El cardenal Cañizares ha escrito un durísimo artículo contra el Gobierno del Partido Popular en el que critica al ejecutivo presidido por Mariano Rajoy de "olvidarse de sus principios" y mantener "la ley vigente que consagra el derecho al aborto". Señala la traición a "las promesas electorales" y aprobar una mínima reforma "más real que aparente".

Dolido, apenado y sorprendido
El Arzobispo de Valencia dice sentirse "muy dolido, apenado y sorprendido" con latraición de los dirigentes del Partido Popular a defender el derecho a la vida y oponerse al aborto.

Para el PP esta ley era inconstitucional
Minirreforma de la ley del aborto es el título del artículo de opinión escrito por el cardenal Cañizares en el diario La Razón  que considera que "la mínima reforma deja intacta la ley y los apoyos de la ley, que el propio Gobierno estimó, en su día, inconstitucional". 

Cambio radical en el Partido Popular
"Desconocía por completo que el Partido Popular había cambiado tan radicalmente hastahacer suyo un texto que reprobó en su momento y que pertenece a la ideología de la oposición".

"No puedo permanecer callado"
"Por honestidad intelectual, por fidelidad a mis convicciones y a mi fe -señala el arzobispo de Valencia en su artículo-, y en mi deber de amor y lealtad para con nuestro pueblo, así como en mi lealtad ante quienes tienen responsabilidades legislativas o de gobierno, no puedo permanecer callado".

Esta ley abre la puerta a la eutanasia
El prelado valenciano anuncia que con "el texto de la ley vigente abre la puerta para legalizar posteriormente la eutanasia, porque, por ejemplo, si determinados diagnósticos prenatales apuntan a enfermedades incurables posteriores pueden ser la base legal para producir legítimamente el aborto de la criatura en el seno de su madre, ¿por qué no hacer lo mismo posteriormente?".

Reclama que la sociedad civil se movilice
Cañizares reclama que se haga sentir con más fuerza la voz de la gente que está a favor de defender el derecho a la vida: "Pido que jueces, expertos en leyes, médicos, pensadores, salgan en defensa del hombre, y de esos niños que no van a nacer, y que cuentan tan poco en la «ley» vigente".

Un cambio en la cosmovisión del PP
El cardenal subraya que "el conjunto de la ley vigente entraña un cambio completo en la mentalidad de nuestro pueblo que apunta a un nuevo modelo de sociedad que nada o poco tiene que ver con lo que somos como pueblo".

Carga ideológica de la ley
En este sentido, el obispo pone el acento en que "con esta reforma mínima se mantiene la carga ideológica del título de la ley vigente, no es más que un anticipo y reflejo de lo que viene después en la exposición de motivos y en el articulado con todo un contenido ideológico que afecta a la visión del hombre, a la consideración y jerarquización de los derechos humanos, y a la misma concepción de nuestra sociedad y nuestra cultura".

No existe derecho a eliminar la vida
Monseñor Cañizares es tajante en reafirmar que "no existe, ni puede existir, ningún derecho a eliminar la vida, ni la propia ni, menos aún, la de otro, y menos todavía aún si es inocente, débil e indefensa".

Una ley muy grave
Para Cañizares, las consecuencias de esta ley "son muy graves. Entre otras, las de unrelativismo brutal –verdadera dictadura– que carcome y mina los cimientos éticos de la convivencia social, que lleva a un horizonte de vida y de sentido en que no hay nada en sí y por sí mismo verdadero, bueno y justo".

Ideología de género en la ley del PP
El Arzobispo de Valencia también alerta de que la ley aprobada por el Gobierno socialista de Zapatero y hoy consagrada por el Ejecutivo del Partido Popular está la "ideología de género’, que es una burda e intolerable manipulación de la mujer a quien, por su propia naturaleza, le corresponden derechos inalienables que todos debemos reconocer y respetar plenamente".

Consecuencias imprevisibles
Por último, Cañizares manifiesta que "el desconcierto que ha suscitado en muchos esta minireforma es más que notable. Las consecuencias son imprevisibles. Con el derecho a la vida no se juega, es innegociable".

Puedo leer el artículo completo del cardenal Cañizares Minireforma de la ley del abortopinchando AQUÍ

Al igual que el cardenal Cañizares, muchos obispos españoles se han manifestado contra el Gobierno del Partido Popular por su cambio en el defensa de la vida y su nueva posición deconsagrar la ley del aborto aprobada por Zapatero que considera al aborto como un derecho. Aquí están algunas de sus manifestaciones:

El obispo Iceta recuerda al PP su programa electoral: su apoyo al aborto «es un fraude al votante»

Ante la «claudicación del Partido Popular», el obispo de Getafe pide a los cristianos «alzar su voz»

El obispo de Osma-Soria dice que el PP ya no es un mal menor: «Se ha convertido en el mal mayor»

El obispo Demetrio, ante el PP de Córdoba, pide luchar contra «el terrible crimen del aborto»

Obispos de Pamplona, El Ferrol, Mallorca y Sevilla se suman a la denuncia del giro abortista del PP

El obispo Reig califica al PP de «estructura de pecado» y siervo del «imperialismo neocapitalista»

El obispo de Castellón acusa al PP de «desleal» y lamenta sus «vaivenes del oportunismo electoral»

Reig Pla revela que Rajoy aceptó el aborto a cambio de «un plato de lentejas» en Naciones Unidas

Los obispos de Toledo, Palencia, San Sebastián, León y Soria lamentan el giro abortista del PP

Los obispos critican que el Gobierno renuncie a defender la vida «en aras de cálculos políticos»

El obispo Munilla dice que «un católico no puede votar a los partidos políticos de ámbito nacional»

Mario Iceta, obispo responsable de Familia y Vida: «Se veía venir esta claudicación», dice del PP

Minirreforma de la ley del aborto



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Minirreforma de la ley del aborto

El desconcierto que ha suscitado en muchos esta míreforma es más que notable. Las consecuencias son imprevisibles. Con el derecho a la vida no se juega, es innegociable


Lamento que mi artículo semanal en LA RAZÓN tenga que ser sobre el tema del aborto. El martes pasado tuvimos la noticia de que el Gobierno, olvidando sus principios, desdiciéndose de gestos anteriores, y volviéndose atrás de las promesas electorales, aprobó una mínima reforma, más real que aparente, de la ley vigente que consagra el derecho al aborto.

La mínima reforma deja intacta la ley y los apoyos de la ley, que el propio Gobierno estimó, en su día, inconstitucional. No podemos olvidar lo que dije en su momento a propósito de la ley vigente, que «el aborto, se quiera o no, tiene que ver con la muerte provocada violentamente contra un ser humano inocente, débil e indefenso: el niño», y esto es una eliminación de un ser humano. Por eso es lo más contrario que se pueda pensar y que peor se pueda casar con la salud, al menos de la criatura a eliminar o eliminada. Con el aborto provocado no se edifica nada, no se sana nada, no se genera vida y salud, sólo se destruye un ser humano, minando además el fundamento mismo de la sociedad formada por seres vivos y sobre la base de un Estado de Derecho.

No existe, ni puede existir, ningún derecho a eliminar la vida, ni la propia ni, menos aún, la de otro, y menos todavía aún si es inocente, débil e indefensa. Con esta reforma mínima se mantiene «la carga ideológica del título de la ley vigente, no es más que un anticipo y reflejo de lo que viene después en la exposición de motivos y en el articulado con todo un contenido ideológico que afecta a la visión del hombre, a la consideración y jerarquización de los derechos humanos, y a la misma concepción de nuestra sociedad y nuestra cultura.

Sin duda, el conjunto de la ley vigente «entraña un cambio completo en la mentalidad de nuestro pueblo que apunta a un nuevo modelo de sociedad que nada o poco tiene que ver con lo que somos como pueblo. De alguna manera el texto de la ley vigente», sancionada por el Partido Popular con esta minirreforma, consolida y «corona un edificio que durante años se trata de edificar».

Desconocía por completo que el Partido Popular había cambiado tan radicalmente hasta hacer suyo un texto que reprobó en su momento y que pertenece a la ideología de la oposición. El aborto, es necesario afirmarlo una vez más, es la violación del derecho más fundamental y sacrosanto de los Derechos Humanos: el derecho a la vida, entrañado en lo más propio de la dignidad inviolable de todo ser humano, base de la convivencia entre los hombres, base de la sociedad.

En el aborto se viola el «no matarás» absoluto inscrito en la naturaleza humana y que pertenece a la «gramática común» del ser humano; en el aborto es derrotada la humanidad, el Estado de derecho y Democrático, la medicina, la Justicia,…, todos, en fin. La ley vigente, sancionada ahora también por el partido en el Gobierno, «en el fondo, consagra la libertad por sí misma –en clave de un idealismo ya superado– como el criterio primero y principio fundamental de la actuación del hombre y del ordenamiento civil. Las consecuencias de esto son muy graves. Entre otras, las de un relativismo brutal –verdadera dictadura– que carcome y mina los cimientos éticos de la convivencia social, que lleva a un horizonte de vida y de sentido en que no hay nada en sí y por sí mismo verdadero, bueno y justo, que genera una mentalidad incapaz para lo que corresponde a la naturaleza, para lo objetivo y válido en sí y por sí, y para principios estables y universales.

Resulta paradójico que la ley vigente que tanto se pronuncia por la libertad, no reconozca la libertad de conciencia ni la objeción de conciencia de médicos, del personal sanitario, o de otros implicados en el asunto, siendo así que la libertad de conciencia y – consecuentemente la objeción de conciencia– está en la base del actuar libre del hombre. En el texto de la ley vigente no reformado «nos encontramos también con la ‘‘ideología de género’’, que es una burda e intolerable manipulación de la mujer a quien, por su necepropia naturaleza, le corresponden derechos inalienables que todos debemos reconocer y respetar plenamente. Esta ideología, como es sabido, va mucho más allá y constituye una verdadera revolución cultural en la que muy pocas cosas quedan en pie».

«Atentos, ademas,a otro asunto: el texto de la ley vigente abre la puerta para legalizar posteriormente la eutanasia, porque, por ejemplo, si determinados diagnósticos prenatales apuntan a enfermedades incurables posteriores pueden ser la base legal para producir legítimamente el aborto de la criatura en el seno de su madre, ¿por qué no hacer lo mismo posteriormente?».

Podríamos abundar en otras cosas. Pero por hoy basta. Me he sentido muy dolido, apenado y sorprendido en mi condición de hombre de fe, pero inseparablemente en mi condición de hombre, sencillamente hombre de razón y como ciudadano de un país como el nuestro. Por honestidad intelectual, por fi delidad a mis convicciones y a mi fe, y en mi deber de amor y lealtad para con nuestro pueblo, así como en mi lealtad ante quienes tienen responsabilidades legislativas o de gobierno, no puedo permanecer callado: ¡Apuesto por el hombre!; y, por eso, apuesto por la madre y por el niño. Es necesario que digamos «sí» al hombre si queremos que haya futuro. Y desde aquí, pido que jueces, expertos en leyes, médicos, pensadores, salgan en defensa del hombre, y de esos niños que no van a nacer, y que cuentan tan poco en la «ley» vigente, en el fondo sancionada de alguna manera por la mínimarreforma que el Partido Popular introduce ahora en su contenido. El desconcierto que ha suscitado en muchos esta míreforma es más que notable. Las consecuencias son imprevisibles. Con el derecho a la vida no se juega, es innegociable.

© La Razón

19 abril 2015

11 abril 2015

Fiesta de la Divina Misericordia.

Transmisión en directo desde el Santuario de la Divina Misericordia, Lagiewniki en Cracovia.

http://www.milosierdzie.pl/lagiewniki/index.php/pl/tv-milosierdzie-pl.html

Las visitas del Papa Juan Pablo II en el Santuario de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki.

Las visitas del Papa Juan Pablo II en el Santuario de la Divina Misericordia en Cracovia-Łagiewniki

7 de junio 1997
El monasterio se encuentra en la colina de Cracovia Łagiewniki. Este era un lugar muy conocido por el Papa Juan Pablo II. Durante la ocupación nazi, pasaba diariamente por allí, dirigiéndose hacia su trabajo en las canteras de Solvay. Entraba todos los días a la capilla del convento. Es difícil establecer cuando fue la primera vez que estuvo allí.
En el registro de los anales del convento sólo figuran los eventos en los que participaba como joven sacerdote, y luego como pastor de la diócesis de Cracovia interesado por la labor apostólica de la Hermandad y el creciente culto de la Divina Misericordia en las formas relatadas por Sor Faustina.
El 7 de junio de 1997, llegó a este lugar, como él mismo confesó, con la necesidad en el corazón, de confiar, delante de la milagrosa imagen de Jesús Misericordioso y las reliquias de Sor Faustina, el destino de la humanidad, la Iglesia y su pontificado a la Divina Misericordia

Discurso del Santo Padre Juan Pablo II pronunciado durante la visita al Santuario de la Divina Misericordia.
«Misericordias Domini in aeternum cantabo» (Sal 88, 2). Vengo a este santuario como peregrino para unirme al canto ininterrumpido en honor de la divina Misericordia. Lo había entonado el Salmista del Señor, expresando lo que todas las generaciones conservan y conservarán como fruto preciosísimo de la fe. Nada necesita el hombre como la Divina Misericordia: ese amor que quiere bien, que compadece, que eleva al hombre, por encima de su debilidad, hacia las infinitas alturas de la santidad de Dios.
En este lugar lo percibimos de modo particular. En efecto, aquí surgió el mensaje de la Divina Misericordia que Cristo mismo quiso transmitir a nuestra generación por medio de la beata Faustina. Y se trata de un mensaje claro e inteligible para todos. Cada uno puede venir acá, contemplar este cuadro de Jesús misericordioso, su Corazón que irradia gracias, y escuchar en lo más íntimo de su alma lo que oyó la beata. «No tengas miedo de nada. Yo estoy siempre contigo» (Diario, cap. II). Y, si responde con sinceridad de corazón: «¡Jesús, confío en ti!», encontrará consuelo en todas sus angustias y en todos sus temores. En este diálogo de abandono se establece entre el hombre y Cristo un vínculo particular, que genera amor. Y «en el amor no hay temor —escribe san Juan—; sino que el amor perfecto expulsa el temor» (1Jn 4, 18).
La Iglesia recoge el mensaje de la Misericordia para llevar con más eficacia a la generación de este fin de milenio y a las futuras la luz de la esperanza. Pide incesantemente a Dios misericordia para todos los hombres. «En ningún momento y en ningún período histórico —especialmente en una época tan crítica como la nuestra— la Iglesia puede olvidar la oración, que es un grito a la misericordia de Dios ante las múltiples formas de mal que pesan sobre la humanidad y la amenazan. (...) La conciencia humana cuanto más pierde el sentido del significado mismo de la palabra “misericordia”, sucumbiendo a la secularización; cuanto más se distancia del misterio de la misericordia, alejándose de Dios, tanto más la Iglesia tiene el derecho y el deber de recurrir al Dios de la misericordia “con poderosos clamores”» (Dives in misericordia, 15).
Precisamente por esto, en el itinerario de mi peregrinación he incluido también este santuario. Vengo acá para encomendar todas las preocupaciones de la Iglesia y de la humanidad a Cristo misericordioso. En el umbral del tercer milenio, vengo para encomendarle una vez más mi ministerio petrino: «¡Jesús, confío en ti!».
Siempre he apreciado y sentido cercano el mensaje de la Divina Misericordia. Es como si la historia lo hubiera inscrito en la trágica experiencia de la segunda guerra mundial. En esos años difíciles fue un apoyo particular y una fuente inagotable de esperanza, no sólo para los habitantes de Cracovia, sino también para la nación entera. Ésta ha sido también mi experiencia personal, que he llevado conmigo a la Sede de Pedro y que, en cierto sentido, forma la imagen de este pontificado. Doy gracias a la Divina Providencia porque me ha concedido contribuir personalmente al cumplimiento de la voluntad de Cristo, mediante la institución de la fiesta de la Divina Misericordia. Aquí, ante las reliquias de la beata Faustina Kowalska, doy gracias también por el don de su beatificación. Pido incesantemente a Dios que tenga «misericordia de nosotros y del mundo entero».
«Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia » (Mt 5, 7).
Queridas religiosas, tenéis una vocación extraordinaria. Al elegir de entre vosotras a la beata Faustina, Cristo confió a vuestra congregación la custodia de este lugar y, al mismo tiempo, os ha llamado a un apostolado particular: el de su Misericordia. Os pido: cumplid ese encargo. El hombre de hoy tiene necesidad de vuestro anuncio de la misericordia; tiene necesidad de vuestras obras de misericordia y tiene necesidad de vuestra oración para alcanzar misericordia. No descuidéis ninguna de estas dimensiones del apostolado.
Hacedlo en unión con el arzobispo de Cracovia, quien tanto valora la devoción a la divina Misericordia, y con toda la comunidad de la Iglesia, que él preside. Que esta obra común dé frutos. Que la Divina Misericordia transforme el corazón de los hombres. Que este santuario, conocido ya en muchas partes del mundo, se convierta en centro de un culto de la Divina Misericordia que se irradie por toda la Iglesia.
Una vez más, os pido que oréis por las intenciones de la Iglesia y que me sostengáis en miministerio petrino. Sé que oráis continuamente por esa intención. Os lo agradezco de todo corazón. Todos lo necesitamos mucho: tertio millennio adveniente.


De corazón os bendigo a los presentes y a todos los devotos de la Divina Misericordia.

17 de agosto 2002
Los preparativos espirituales y logísticas de la visita del Santo Padre a Łagiewniki, al Santuario de Divina Misericordia comenzaron en febrero de 2002. Fueron la oración, el sacrificio y los estudios de las enseñanzas del Papa Juan Pablo II por la Congregación de las Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia, los socios, la Fundación del Santuario de la Divina Misericordia , la asociación Faustinum, Centro Juvenil de la Educación y numerosos peregrinos. Pensando en los jóvenes se organizaron una serie de conciertos de evangelización bajo el lema "Sed ricos en Misericordia", junto con una breve conferencia y la Coronilla de la Divina Misericordia. La preparación directa fue la novena (7-15 de agosto de 2002), que consistía en una oración en la hora de la Misericordia, la Coronilla , la novena de la Divina Misericordia y las Santas Misas con homilías sobre temas tomados de la encíclica de Juan Pablo II, Dives in misericordia.

Después del anuncio que el Papa Juan Pablo II llegaría a consagrar el templo erigido desde el 8 de septiembre de 1999, todas las personas comprometidas en su construcción se pusieron muy alegres. Los responsables de la realización de la obra hacian todo lo posible para que la parte principal de la iglesia esté preparada cuanto antes para la consagración. En este intenso período de construcción trabajaban allí más de 100 trabajadores en dos turnos, y en el periodo cumbre el número de trabajadores superaba 200. Los plazos extremadamente ajustados hicieron que el ritmo de trabajos, muy rápido hasta la fecha en condiciones polacas, llegara a ser asombroso.

La ceremonia de la consagración de la iglesia principal el 17 de agosto de 2002 reunió más de 22.000 fieles en tres lugares: en el interior de la iglesia (4.000 personas). - Sectores VIP, A, B, C, el sector de la prensa, en el estacionamiento de la casa pastoral (3.000 personas). - Sector D, y en la plaza de la iglesia (sector E) y a lo largo de la ruta de la comitiva papal (15 mil personas.). La invitación a la ceremonia fue dirigida principalmente a los donantes de la Fundación del Santuario de la Divina Misericordia, constructores de la iglesia e invitados por el obispo metropolitano de Cracovia, Cardenal Franciszek Macharski y las Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia.

Los datos pormenorizados sobre las personas invitadas a la consagración de la iglesia de Cracovia Łagiewniki son los siguientes:
número total de donantes: 8.856 personas
número total de invitados de honor: 600 personas
constructores: 1154 personas
número total de personas invitadas por las Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia: 1550 personas
número de personas de obras de caridad: 1016 personas de 98 obras de caridad y 131 personas con discapacidad
número total de representantes de instituciones y organizaciones: 2046 personas
otros: 11 000 personas


Cabe señalar que entre el número de participantes de las ceremonias papales se encontraban entre otros los sacerdotes de la Arquidiócesis de Cracovia (418 personas), los rectores de las parroquias de la Divina Misericordia y de Sor Faustina en Polonia (149 personas), los empleados de la Curia Metropolitana de Cracovia (107 personas), las personas que recuadaban donaciones en Łagiewniki y en el Parque Błonie (scouts, monjas y laicos - unas 1.500 personas). Entre los participantes también hubo grupos de extranjeros, principalmente de Hungría, Italia, EE.UU., Eslovaquia, Ucrania, Bielorrusia, Alemania, Francia, Holanda, Suecia. Los demás donantes de la Fundación del Santuario de la Divina Misericordia. 33 000 personas fueron invitadas a participar en la misa papal en Parque łonie.

En relación con la visita del Santo Padre al Santuario de la Divina Misericordia los donantes también fueron invitados al oratorio especial "Huésped esperado" sobre la base del drama de Zofia Kossak, que tuvo lugar el 17 de agosto de 2002 a las 21.00 horas delante de la nueva iglesia. En el oratorio han tomado parte 150 músicos de la Orquesta Filarmónica de Silesia, 10 solistas, dos coros y la banda de folk "Grojcowianie". Un evento importante de aquel día, fue también la Peregrinación Nacional de los Húngaros. Con este motivo, se celebró una Misa solemne en la nueva iglesia presidida por los representantes del Episcopado de Hungria.

Las oraciones no cesaron incluso después de la visita del Santo Padre. En el santuario de Łagiewniki, en agosto de 2002, entre los dias 17- 24 tuvo lugar una solemne octava de agradecimiento por la peregrinación de Juan Pablo II a Polonia, por la consagración de una nueva iglesia en el santuario de Łagiewniki asi como por el acto de la encomendación del mundo a la Divina Misericordia.
Esta acción de gracias sigue. Un signo visible de la importancia de los hechos realizados ha sido una afluencia inusual de peregrinos al santuario (700 000 personas en el período posterior a 08/17/2002). La consagración de la iglesia principal y el número creciente de los peregrinos ha
puesto ante la Fundación de la Divina Misericordia los demás deberes relacionados con la más pronta posible ampliación del Santuario.


Discurso del Santo Padre Juan Pablo II pronunciado durante la visita en el Santuario de Divina Misericordia de Cracovia Łagiewniki.

Al final de esta solemne celebración, deseo decir que muchos de mis recuerdos personales están relacionados con este lugar. Solía venir aquí especialmente durante la ocupación nazi, cuando trabajaba en la cercana fábrica Solvay .Recuerdo hasta hoy el camino que conducía desde Borek Fałęcki a Dębniki y por el cual pasaba todos los días, llegando a los turnos de trabajo diferentes, llegando con los zapatos de madera usados en aquel entonces. Como se podía imaginar que este hombre en los zapatos de madera un día iba a consagrar la Basílica de la Divina Misericordia en Cracovia Łagiewniki. Me alegro de que se haya levantado este hermoso templo dedicado a la Divina Misericordia. Confío la tutela por la forma material y sobre todo espiritual al Cardenal Franciszek de la Arquidiócesis de Cracovia y a las Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia Que esta cooperación en la labor de difundir el culto de la Divina Misericordia traiga sus frutos en los corazones de los fieles en Polonia y en todo el mundo.
A todos los peregrinos que vienen aquí y van a llegar, que el Dios Misericordioso bendiga ricamente.

Juan Pablo II, Cracovia-Łagiewniki, 17/08/2002

El ejemplo vivo de gratitud a Dios rico en la Misericordia por el pontificado de Juan Pablo II

El Papa Juan Pablo II, ha firmado el 31 de marzo de 2005, una carta destinada a ser leída en el domingo de la Divina Misericordia en el Santuario de Łagiewniki. En esta carta, escribió: "Me alegro que este domingo se inicie en el Santuario la Adoración Perpetua del Santísimo Sacramento. Nada presencia la obra de la misericordia más que la presencia eucarística del Señor,
misericordia que se llevó a cabo a través de la Cruz y la Resurrección.".

Por lo tanto, os pedimos en el Año de la Eucaristía y el Centenario del nacimiento de Santa Sor Faustina para que de la adoración perpetua, que dura 24 horas del día todos los días del año (excepto el Viernes Santo), hacer un monumento vivo de gratitud a Dios rico en Misericordia por el pontificado de Juan Pablo II. La disposición a la oración puede ser avisada en el Santuario de la Divina Misericordia en persona, por teléfono e internet.

En particular, también queremos hacer referencia a los jóvenes, tan cerca del Santo Padre. Que nuestra presencia en Cristo Eucarístico nos hará auténticos testigos de la misericordia y renueva la faz de la tierra!

Custodio del Santuario de la Divina Misericordia


Carta del Papa Juan Pablo II en el Domingo de la Misericordia

Se acerca el domingo de la Divina Misericordia. En esta ocasión deseo expresar mi cordial saludo a todos los que se reunirán en Cracovia, en el Santuario Lagiewniki para adorar a Dios por su amor
Indulgente (remisivo). Me gustaría una vez más confiar a esta caridad la Iglesia y el mundo, a todas las personas del mundo entero, así como a mí mismo en mi debilidad.

Me alegro de que este domingo se inicie en el Santuario la Adoración Perpetua del Santísimo Sacramento. No hay nada como la presencia eucarística del Señor, hace reales las obras de caridad, que se llevó a cabo a través de la Cruz y la Resurrección. Que esta presencia, por lo tanto, sea para todos los peregrinos una fuente de fortaleza y esperanza.

Os bendigo de corazón a todos los adoradores de la Divina Misericordia:

En el nombre del Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Vaticano, 31 de marzo 2005.

Juan Pablo II, Papa

05 abril 2015

CRISTO HA RESUCITADO.

VERDADERAMENTE HA RESUCITADO.